Desde los parajes más reconditos de Burgos, nos llegan escritos de otro bloguero, compañero y amigo, Sergio Rioja, una cerveza, un folio y una pluma, poco más necesita.
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Todo cambia a la luz de los ojos, son simples focos de banalidad y corrupción social. Nos dejamos embriagar por la alineación que ejercen sobre nosotros los poderosos, dejamos de pensar y al dejar de pensar, cometemos el grave error de la humanidad. Dejar su destino, poner su vida al servicio de alguien, depender de una decisión, luchar por ser como quieren que seas.
Pues bien, yo les digo que para obtener lo que ellos quieren que sean no necesitan luchar, ni pensar, aunque os vendan esa idea. Si quieren luchar, si quieren albergar en su cabeza alguna idea, algún pensamiento digno de interpretar, han de pensar ustedes por su cuenta, olvidarse de la totalidad dirigida, olvidarse de la persona distinguida, que todos los días le dice lo que es mejor para usted, ha de olvidar todo lo que le digan y actuar según el convenio de su mente.
No los mentiré es difícil el camino del que se distancia del canon, del que actúa sobre su decisión y no sobre la imposición, del que escapa a la alineación y del que lucha la represión.
Pongámonos en situación, nos venden elegancia y educación, nos venden un ideal de vida, una ilusión de camino, de su camino, del camino imposible del banco, del camino de la hipoteca, del camino de la democracia, del camino del capitalismo. Y llegan a tales extremos que idealizan situaciones, convierten sujetos en estrellas y nos los integran en la mente, hoy en día la sociedad está llena de “belenes esteban” que ansían lograr ser “lomanas”; gente inculta, gente capaz de vender su cuerpo y su mente, su intelectualidad, su persona y su dignidad por un puñado de billetes. Porque si señores, hay que reconocerlo, lo han conseguido, dependemos totalmente del dinero, prueba de ello es la gran crisis que atravesamos.
Ante esto, debemos despertar, olvidarnos de esta falsa idea de sociedad, saltar de ella, acabar con el maltrecho capitalismo y cambiar el sistema. Destruir la moneda y las barreras, crear sociedades regidas por la dignidad, el respeto y el trabajo. Olvidarnos de la propiedad, olvidarnos del dinero y del derecho, olvidarnos del poder y destruir los estados.
Con esto no hablo de una sociedad anárquica sin control, de una sociedad sin un idioma con el que entendernos, solamente intento explicaros como crear una sociedad pura y estable, olvidándonos del poder, creando una verdadera democracia en la que hasta el mas mínimo cambio se lleve a voto, con un recuento llevado por alguien al azar. Un mundo donde la persona siempre tenga el derecho al voto y la opinión, y no una sola posibilidad cada 4 años, para finalmente seleccionar a los mismos de siempre con diferentes chaquetas.
Dejemos de quejarnos, dejemos de idealizar, levantémonos. Destruyamos los gobiernos.
Si levantémonos, pero no tras un líder, levantémonos como pueblo, elevémonos como sociedad, destruyamos al político, derribemos la torre de oro del banquero, escapemos a la manipulación de la prensa, olvidémonos de los circos que nos amansan y juntémonos todos en uno. Unidos por nuestros diferentes deseos, por nuestros diferentes anhelos.
Solo así podremos escapar de esta alienada sociedad. Solo así podremos crear una verdadera sociedad totalitaria y regida por el individuo, el individuo que trabaja en alimentarla. Solo así
podremos mantener la paz total, ya que una vez no haya por que enfrentarnos, no haya dinero o poder, solo quedara la hermandad y fraternidad para todos progresar.
Y sé que es mucho pedir para una sociedad que lleva dormida desde los tiempos de la pepa. Pues esta sociedad vive en el olvido, vive dividida entre rojo y azul sin darse cuenta que la solución está en unir ambos colores, en un morado firme una unión inapelable, una unión fuera de fanatismos, una unión tangible, una unión que nos lleve a destruir el mayor mal del humano: el poder, el poder creo todo el sistema global y la única forma de conseguir un cambio total, un estado sin igual, es destruirlo todo desde la base, acabar con la totalidad del sistema para crear el sistema justo y licito para todo ser.
Elevémonos como aquel 2 de mayo de 1808, pero esta vez no para derribar al extranjero, esta vez para derribar nuestra venda, la venda del mundo, unámonos como fuerza, acabemos con reyes, presidentes y dictadores, que ansían el poder. Acabemos con toda forma de gobierno, llevemos la práctica de la anarquía a su verdadero culmen, sin pasos previos sin esperar generaciones, el momento es ahora. EL DÍA ES HOY.
Por eso deseo que desde los mas recónditos parajes de sierra morena, hasta Finisterre existan voces que clamen en alto: ¡VIVA LA PEPA!, viva la anarquía, viva la justicia vidente, viva el pueblo en uno, viva el deseo propio.
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También podéis leerlo aquí, su particular cueva:
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